Después de una ausencia prolongada debido a una lesión en la cadera sufrida durante el torneo de Brisbane a principios de este año, Rafael Nadal continúa su ardua tarea de recuperación, retrasando su regreso a las pistas hasta marzo. La exhibición en Las Vegas con Carlos Alcaraz y el Masters 1000 de Indian Wells han sido los destinos postergados, después de que el tenista español declinara su participación en Doha, como estaba originalmente planeado.
El regreso de Nadal a la competición en Brisbane marcó un hito después de casi un año de inactividad, con la mirada puesta en su futuro profesional. Sin embargo, el camino hacia la recuperación plena no ha sido fácil, como el propio Nadal ha reconocido en una reciente entrevista con la Cadena Cope. «Sé que no estoy en condiciones de competir con los grandes en este momento. Sobre todo porque he estado un año fuera de las pistas y ellos son muy buenos», expresó Nadal con sinceridad.
A pesar de los desafíos que ha enfrentado, Nadal sigue manteniendo su enfoque en la temporada de tierra, con la vista puesta en eventos emblemáticos como Roland Garros y los Juegos Olímpicos de París. Sin embargo, reconoce que hay días en los que el optimismo decae y los pensamientos negativos afloran. «Claro que hay días en los que tengo pensamientos negativos y cuando las cosas van mal, uno se cuestiona qué hacer», admitió el ganador de veintidós Grand Slam.
Además de su dedicación al tenis, Nadal ha compartido sus intereses por otros deportes, particularmente el fútbol, donde muestra su admiración por jugadores y técnicos de renombre como Carlo Ancelotti. Sin embargo, también ha sido claro en expresar su opinión sobre cuestiones sociales y económicas, como la igualdad en el deporte y la gestión financiera de los clubes.
«El feminismo a veces se lleva a unos extremos… Pues claro que quiero igualdad, pero la igualdad no reside en regalar, reside en que si Serena Williams genera más que yo, quiero que gane más que yo…», dijo ante las preguntas sobre igualdad salarial en el deporte.
De forma indirecta, el manacorí también habló sobre el reparto igualitario de ingresos entre todas las personas, considerando que el número 50 del mundo no debería ganar lo mismo que el número 1.
En un momento en el que su futuro en el tenis está en entredicho y las especulaciones sobre su posible retirada son frecuentes, Nadal ha dejado entrever que ya ha contemplado cómo le gustaría despedirse de las pistas. Aunque se mantiene reservado al respecto, su determinación por regresar a la competición es innegable.
Por otro lado, la reciente vinculación de Nadal con la Federación de Arabia Saudí ha generado controversia. Sin embargo, el tenista español ha defendido su decisión, argumentando su creencia en el progreso y su compromiso con el deporte y la educación como agentes de cambio. Aunque reconoce las críticas y el escepticismo que rodean esta asociación, Nadal ha dejado claro que su motivación radica en contribuir al desarrollo de un país más deportivo.
«En este país hay un tema que es el del dinero. Está mal visto la gente que gana dinero…», dijo el tenista.
«Yo no he firmado un contrato multimillonario. Lo que he firmado con la Federación de Arabia no va a mejorar mi vida ni un céntimo. Lo he hecho porque al final me ilusiona el futuro. Lo que voy a hacer. Mi pasión siempre ha sido el deporte no solo como deportista profesional. Como espectador y deportista de otros deportes. Con el tiempo se verá si la decisión ha sido acertada o no acertada y decidiremos. He tomado una decisión. Entiendo a día de hoy que se discuta pero la he tomado con ilusión. Si no es lo que espero será una desilusión», sentenció.