La verdad es que hay gente que, o no ha tenido nunca sentido común, o tiene el sentido común completamente anulado por el miedo o por la falta de oxígeno en el cerebro provocado por la mascarilla.

No leen, no buscan evidencias, no razonan cuando ven las evidentes contradicciones con las que nos encontramos. Simplemente ven la tele y piensan lo que ese aparato del demonio les diga que tienen que pensar. Imaginen, un hombre que se pone las dos dosis de la vacuna y, desgraciadamente, muere por el virus. Hasta ahí está sucediendo tantas veces que ya podemos decir que es incluso normal, a pesar de lo trágico.

Pero tiene un amigo que se hace eco de la triste noticia en Twitter y vean cómo lo cuenta porque a nosotros nos cuesta hasta leerlo de la repulsión y de la vergüenza ajena que nos provoca esa falta absoluta de sensatez: “Me acaban de dar la triste y lamentable noticia que un gran amigo muriò por causa del COVID-19. La paradoja de este caso es que tenia las 2 dosis de la vacuna. No debemos confiarnos por estar vacunados, tenemos que mantener el distanciamiento y la mascarilla!!”

Sí, han leído bien. El tipo, lejos de razonar lo que él mismo está escribiendo califica el suceso como paradójico y da como solución más mascarilla y distanciamiento social. Y es él mismo quien lo escribe. Suma las dos dosis de vacuna más el fallecimiento por el virus y le da como resultado lo de la mascarilla y el distanciamiento. Pero, ¿qué le pasa a esta gente?